La UNODC (Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito) ofrece una amplia gama de actividades de asistencia técnica para ayudar a los países a combatir los delitos contra la naturaleza. Las actividades se llevan a cabo en todo el mundo, en los países de origen, de tránsito y de destino. En particular, la UNODC apoya revisiones de la legislación nacional; proporciona formación especializada y equipos a los guardabosques, la policía, las aduanas, los fiscales, los investigadores y el sistema judicial, incluso mediante la incorporación de mentores en unidades especializadas; fortalece los mecanismos de control de los envíos marítimos internacionales en los puertos principales; desarrolla la capacidad de análisis forense en los estados afectados; desarrolla estrategias para prevenir los delitos de la vida silvestre, incluso mediante la promoción, la sensibilización y la potenciación de la sociedad civil; proporciona medios de vida alternativos a las poblaciones afectadas; y apoya la cooperación internacional entre los organismos encargados de hacer cumplir la ley.
Solo en 2015, la UNODC capacitó a más de 800 profesionales policiales y de la justicia penal, entregó equipos de inteligencia a diversos cuerpos de la policía y unidades de delitos contra la vida silvestre, ayudó a revisar los códigos penales y las leyes en muchos países, y abordó el lavado de dinero y la corrupción relacionados con los delitos de la vida silvestre. Este trabajo continúa vigente.
La UNODC, junto con colegas del Consorcio Internacional para Combatir los Delitos contra la Fauna y Flora Silvestre (ICCWC), ha desarrollado una serie de herramientas y manuales para ayudar a combatir el comercio ilegal de vida silvestre, inclusive el Juego de herramientas analíticas para los delitos forestales y de vida silvestre del ICCWC, las Directrices sobre métodos y procedimientos para el muestreo y análisis de laboratorio del marfil, y la Guía de mejores prácticas para la identificación de tala forense.
La UNODC colabora con una amplia gama de entidades asociadas, entre ellas el ICCWC, programas y organismos de la ONU, instituciones de investigación, ONG, y organismos y redes regionales, para garantizar que los delincuentes vinculados con los crímenes de la vida silvestre sean detenidos y procesados.